Faltan 8 horas para la izada pero en el patio de Katalin Erauso suenan ya los primeros compases de la marcha de San Sebastián. Un centenar de niños y niñas hace sonar sus instrumentos mientras los dantzaris les acompañan. Son las 16: 00 horas se empiezan a recorrer las calles del barrio de Amara.
Desde 1988, una gran comitiva de cocineros, desde los 4 hasta los 12 años, lleva sus redobles por otros “coles”, demás establecimientos del vecindario y la sucursal de la DYA, donde cada año sus sirenas se encienden para hacer las delicias de los más pequeños.
Esta tamborrada de origen humilde y muy ligada al barrio anima cada 19 de enero la espera del gran día. Sin lugar a duda, para los alumnos es un privilegio que sus golpes de tambores y barriles, acompañados por la música en vivo de una charanga, despierten la fiesta en la ciudad.
