Los vascos residentes en Valladolid no habían sentido, anteriormente, inquietudes especiales en relación con el interés de asociarse para constituir un colectivo de ideas afines y un bloque de mutua ayuda. Hacia 1981, tras algunas reuniones previas en domicilios particulares, se pasó a encuentros continuados semanales en establecimientos diversos de la industria hostelera vallisoletana, con particular incidencia en el mesón Don Claudio, propiedad de un irunés.
Se designó una Junta Gestora cuyos primeros objetivos fueron la redacción de unos Estatutos y la consecución de un Local Social que, en función de los Socios del momento, tenía necesariamente que ser alquilado. Las obras de adaptación del local a las condiciones mínimas exigibles a un Centro Vasco fueron sufragadas y realizadas (con el sudor de su frente) por los Socios Fundadores. A principios de 1984 ya estaba funcionando el local en la calle Alonso Pesquera.
Los socios y simpatizantes organizan una comida o cena (según como caiga el día de San Sebastián) donde el menú esta compuesto de angulas y solomillo. El Tambor Mayor y alma mater de la celebración es el ondarrutarra Iker Aramayo que dirige a los tamborreros que interpretan las marchas de Sarriegi con los tradicionales kits de tamborrada.
